Hace una semana se deslizó un talud en el frente de una vivienda
MARIBEL SÁNCHEZ
“Esta casa ya tiene alrededor de 50 años, nosotros nos mudamos para acá hace un año cuando falleció mi suegro. Las filtraciones por supuesto ya traen una historia, pero se han venido agravando con las lluvias actuales. Hace una semana se registró un deslizamiento que dejó a punto de venirse abajo la escalera principal. En otras palabras, estamos por quedarnos incomunicados, presos dentro de la casa o fuera sin poder entrar”.
De esta manera se expresó Abraham González, quien vive junto a su esposa y cuatro niños en el callejón dos de Las Cadenas.
Al momento de producirse el hecho, cuyos escombros cayeron en la vía principal, se vino abajo una cerca que protegía al patio de la vivienda y las tuberías que canalizan las aguas residuales de la casa vecina.
Ante este debilitamiento y tras las constantes lluvias el terreno sigue socavando, amenazando también con devastar el patio y porche; a lo que se le suma el deterioro del terreno base que frecuentemente se humedece con aguas pluviales que bajan como un río y se meten por dentro de la casa, generando graves filtraciones y agrietamientos en pisos y paredes.
“Hemos solicitado el apoyo a la Alcaldía de Guaicaipuro respecto a materiales para efectuar las reparaciones necesarias, que eviten se siga desmoronando el terreno, nosotros podemos poner la mano de obra”, aseguró.
Recuerdo sombrío
Hace 15 años, este mismo inmueble fue víctima de un incendio en una de las habitaciones posteriores, el cual fue causado por un corto circuito.
“Para ese entonces, el equipo de Protección Civil acudió e hizo una inspección, pero jamás consideraron que la casa estuviera en riesgo. Sin embargo, si nos visitaran ahora tal vez nos pedirían desalojar, dadas las condiciones en la que está toda la estructura”.
Hace un año, Abraham y su esposa fueron beneficiados con la entrega de diez láminas de zinc, entregadas por el alcalde Farith Fraija; las cuales se utilizaron en el cuarto de los pequeños, ese que una vez protagonizó el incendio.
Árbol peligroso
Otro hecho que preocupa a Rosa de González, esposa de Abraham, tiene que ver con un enorme árbol ubicado a la entrada de su casa. “Tiene las raíces expuestas y tuvimos que improvisarle una especie de estaca para intentar sostenerlo”.
Detalló que han pedido apoyo a Corpoelec para proceder a talarlo, pero no han obtenido respuesta. El detalle radica que, al desplomarse se llevaría consigo parte del tendido que suministra energía eléctrica al callejón donde residen unas cien familias.
“Vivimos angustiados entre el deslizamiento que tenemos en el frente, el socavamiento por debajo de la casa y ese árbol que en cualquier momento se cae. No podemos pegar un ojo cuando llueve por las noches, tememos lo peor”./rp