Temen que muro en el 23 de Enero termine de colapsar
ANELIM GONZÁLEZ
El 9 de junio del presente año, un muro que colinda con la Escuela Nacional Guaicaipuro, ubicada en la comunidad del 23 de Enero en Los Teques, se vino abajo tras una fuerte lluvia; la situación alertó a todos los vecinos de la zona quienes contactaron al Cuerpo de Bomberos y Protección Civil.
A un mes de este derrumbe, lugareño, manifestaron que no se ha realizado ninguna reparación, trayendo como consecuencias que niños y jóvenes ingresen a las instalaciones sin supervisión alguna.
“Los niños se meten a la cancha por el matorral, justo donde había caído el muro que ese espacio quedó libre. Imaginamos que no debe de tener ningún tipo de vigilancia o algo por el estilo; usan unas cabillas para impulsarse y de ahí solo suben”, dijo Glady Belis, residente de la zona B de la comunidad.
Destacó que hay mucha maleza en el sitio, lo que genera el temor de muchos ante un posible peligro para los niños y para los transeúntes que circulan por el sector.
“Ahí se pueden encontrar una culebra o un alacrán, algún tipo de animal que pueda picarlos. Es un peligro, porque también, se puede meter cualquier otra persona que robe algo en la escuela o que se oculten ahí y roben a un vecino”, señaló.
Al momento de la caída del muro, cuadrillas de Serviguaicaipuro acudieron a la zona para realizar un trabajo de despeje y limpieza, además de desmalezamiento para el área, sin embargo, las frecuentes lluvias han hecho que la maleza crezca rápidamente.
Efecto dominó
“Si se cayó ese, puede que el resto continúe, como un efecto dominó. El agua también que corre y deteriora es un factor importante”, afirmó.
Otro habitante enfatizó: “Hay una parte del muro, cerca de la entrada, donde la pared se ve abombada, está reteniendo una gran cantidad de tierra que con las lluvias se desliza hasta que no pueda aguantar más y será allí que también colapse”.
El equipo de Avance, pudo constatar el estado de deterioro y las múltiples grietas que tiene el muro, así como la maleza y plantas que lo rodean.
“Lo que no queremos es una tragedia mayor; es importante lograr una unión entre la comunidad, el plantel y las autoridades para hacer un trabajo de reparación total que evite cualquier problema a futuro”./rp